HEDIODISMO, CAPITULO CERO.
Tenía pensado dedicar unos cuantos posts a cómo la prensa que ejerce un apoyo incondicional a nuestro actual Consell había despelgado, en estos últimos quince días, todo su poder de tergiversación, partidismo y -cuando procede- soslayo para compensar el efecto negativo de la moción de censura.
Sin embargo eran tantos los artículos y tantas las omisiones que no sé yo si me veré co ánimos. Aunque la crónica periodística de estos días bien merece la pena.
La suerte que tiene ese periodismo es que siempre hay alguien que consigue llegar más lejos.
De los informes "falsificados" y del ácido bórico ya ni les cuento. Sin embargo, más de uno se frotó las manos cuando Garzón llamí a declarar a los peritos cuyo informe había sido supuestamente falsificado. Tanto que el inefable Motes -Motícies 9- conectó en directo por la noche con la corresponsal de Madrid, "a ver si había algo".
Curioso que cuando por fin "hay algo" -ya saben vds. qué: los falsificados acusados de falsificadores- el asunto ni merece conexión en directo ni una rectificación inteligible, sólo un corte de 25 segundos en últimas posiciones del noticiario de las 21:00 y por supuesto aún con las imágenes de las "primicias" Mundiales.
Sacarán hoy los titulares de El País? Creo que no.
Lo dicho, periodismo que hiede.