DE ENCUESTAS Y PRONÓSTICOS (2ª parte)

 Nos habíamos quedado en los resultados de las Europeas, con gran bajada del PSOE y grandísima y nunca vista del PP....

El PP se apuntó a una excusa muy vieja: "mis votantes se han quedado en casa. A las próximas, ya saldrán". Lo cual en principio parecía poco creíble pues los datos de participación no se fueron de tanto, respecto a las anteriores europeas. Pero se podía vender la moto si se hacía la trampa de comparar con otras elecciones no europeas e insistiendo en que en estas elecciones "de castigo" se moviliza más el electorado que va a hacer daño, tipo Podemos y demás rojillos. Bueno... No obstante les recuerdo que el PSPV ya patentó la teoría del "votante abstencionista dormido" y llevan lustros buscando el despertador.

Encuestas posteriores empiezan a marcar dos tendencias. Siempre de ámbito estatal, su restricción autonómica gira en torno al invariable 20% de Podemos, y un 10% aproximado para EU y COMP respectivamente. La gran diferencia estriba en que en unas el PSOE se acerca al PP peligrosamente -el famoso sorpasso, aunque creo que la expresión sólo se gasta cuando el adelantamiento es entre dos partidos de la misma cuerda, ¿no?- mientras que en otras es Podemos quien empata o incluso ¡adelanta! al PSOE mientras el PP navega sobre un 35%. Antes de entrar en las más recientes del 9 de Octubre y posteriores, he de aseverar que me escaman ambas tendencias.
Ni me acabo de creer que el PSOE le eche el aliento en el cogote al PP -sea el de Rajoy o el de Fabra- ni tampoco que Pablo Iglesias o quien elijan aquí hagan lo propio con Pedro Sánchez o Ximo Puig respectivamente.

En todo caso, el efecto P20 -Podemos alcanza el 20% de votos y en la CV, algo menos pero también 20 escaños- tiene un titular predominante: A Ximo Puig se le complica el tripartito. De ahí los matices que ustedes quieran. Que si va a gobernar con radicales, que si esto va a ser un batiburrillo, que ante ello nada como la estabilidad -¡¡manda huevos!!- que ofrece el PP-CV... de entre las muchas perlas, quisera destacar, antes de que se me olvide, una portada de LP en la que, narrando los hechos, lamentables sin duda, de las protestas ante el Ayuntamiento de Alicante, el diario valenciano titulaba "El tripartito intenta tomar el ayuntamiento de Alicante". Dejando de lado -ya no soy el que era- el trazo grueso, el lenguaje de parte de guerra y la exageración del enfoque, lo realmente destacado y novedoso es que el aludido "tripartito" comprendía EU, Compromís y... ¡Podemos! Vaya por Dios, por primera vez el PSPV quedaba excluido de esa etiqueta. Saquen sus propias conclusiones. Como es lógico, de nuevo la Arrosse Koalition vuelve a aparecer como solución mágica. Del matrimonio de conveniencia entre Rosa Díez y Albert Ribera se sigue hablando, aunque se antoja una muleta muy pequeña para la cojera que aparta al PP de la mayoría absoluta. Ya que estamos en esto, voy a hacer uno de los varios "off topic".

UNIR UPyD con C's o CÓMO PEGAR LA CERA Y EL TEFLÓN.

Me van a permitir que me centre en la restricción a la CV de este asunto. Si en el ámbito estatal ya es bastante sonoro el ruido mediático celestiniano entre estos dos novios, aquí es realmente clamoroso. Ya entraré con detalle en la curiosa manía de recomendar coaliciones a tenor de las encuestas -peculiar aunque legítima desde los medios, inadmisible, a mi entender, desde terceros partidos políticos- pero en este caso en particular, no acabo de ver el fundamento.

Entendí -sin necesariamente coincidir- la sugerencia de unión entre EU y el BLOC -que a la postre y pese a las apariencias iniciales ha acabado siendo provechosa para todos- por la coincidencia ideológica y el mecanismo de supervivencia. Entendería igualmente la de UPyD y C's si no fuera por dos grandes diferencias.

Primera: ¿qué objetivo tiene? porque lo de la izquierda estaba/está claro, pero en este caso, no. ¿Servir de muleta al PP-CV? ¡Caramba! si ya le ponemos pegas con mayoría absoluta, qué puede ocurrir si encima depende de dos partidos cuyas lineas generales en la CV son más que difusas. Y nadie asegura que apoyaran que este agonizante régimen se mantenga cuatro años más. ¿Y para un gobierno de izquierdas? Parece difícil: al menos uno cuando no los dos integrantes del dúo, tienen diferencias irreconcialiables con uno o más de los posibles socios de gobierno. Así pues, como no sea para experimentar el juego que da antes de pasar el invento a ámbito estatal...

Segunda: si algo le hace falta a UPyD para alejarse definitivamente de la barrera que permite entrar en les Corts, es asociarse a... espera... ¿Ciutadans? ¿Ciudadanos? y encima cuál es su cabeza visible... ¿Albert Ribera? Un señor que encima es catalán, ¡per la geperudeta!

Hay que prestar poca atención a los detalles para no darse cuenta de que aquí no ganan las elecciones personas con el nombre en Valenciano, no digamos en Catalán. De verdad, que es así... miren si no: Francisco -que fue temporalmente Francesc pero a mitad de legislatura-, Alberto, Eduardo, hasta Lizondo era Vicente y no Vicent!!!

Aunque sale mucho en las teles, Albert Ribera sigue teniendo como imagen ser un señor que es catalán pero sin serlo tanto, o siéndolo de otra forma. Quien crea que eso vende aquí en la CV o el RV -"Ostras tú, cómo mola: un catalán normal!"- está equivocado. El público que estamos -bueno, que están- buscando  huye como una centella de casi todo lo que huela a Catalunya. Que es así, créanme, que en estas cosas somos como somos y el trazo es muy muy grueso... Si el invento, vistos los resultados, parece funcionar difícilmente lejos del lugar donde está la confrontación que es motor de su razón de ser -imaginen montar un partido anti vampiros a 20.000Km de Transilvania- aquí menos aún: la posible simpatía que en teoría pueda despertar su "causa" se diluye en los detalles de apariencia entre un electorado que no se fija tanto.

Vamos, si hace lustros que dejaron de votar a valencianos que estaban a la greña con los catalanes, como para votar ahora a uno que también lo está pero encima es catalán.

En fin, es hora de cenar....

(continuará...)