ME LO DIJO PEREZ
No es la primera ni la más oportuna ocasión en que un periodista que se las suele dar de fino observador –impagables sus “diálogos de la calle” apócrifos- o de irreductible e independiente, escribe un panegírico a la mayor gloria de nuestra alcaldesa o nuestro presidente.
Es por ello que no puedo aducir un motivo especial para referirme a ello en esta ocasión. En realidad ha debido ser la dejadez la que en otras ocasiones me haya desanimado de decir algo.
En definitiva, me llama poderosamente la atención el inmaculado panorama que nos pinta hoy respecto a nuestro Molt Honorable. “Un candidato suelto y resuelto”, titula. Vaya por Dios! De la lectura detenida del texto se deducen varias cosas. Son varios los motivos de elogio, como esa supuesta serenidad –¿lo ha visto en los plenos?-, ese pedir “ni más ni menos que los demás”. No falta la gran virtud de amar a a España y la Comunitat –le sobraron arrestos para “ondear la bandera de España”, justo es decirlo- , también nos presenta la virtud de estar en el justo centro entre la malvada y codiciosa hidra Zaplanista –que le puso ahí, no lo olvide- y ¡válgame! el innombrable mostruo catalanista izquierdoso –cuarenta años de escribir deberían dar para sacarse efectos más ingeniosos, creo yo- pero que más me llama la atención no es lo que le gusta de nuestro president.
Me resulta más alarmante que le pase por alto sus silencios cómplices, su demagogia, sus promesas incumplidas, su uso y abuso de la propaganda pagada con dinero público, sus trolas respecto a la oposición, su tono depreciativo y displicente al referirse a esta, sus contradicciones obvias con –oh, sí!- la lengua de los valencianos, el uso mínimo y testimonial que hace de esta, sus irresponsabilidades –“no soy experto fiscal”- su uso indecoroso de la rivalidad con el vecino del norte sin mediar provocación –“el voto al PSPV es el voto del complejo, el voto mirando al norte” (mayo 2003, 7 meses antes del tripartito)- sus aseveraciones destarifadas –“Haremos el trasvase del Ebro nosotros, y el agua saldrá gratis” (Mayo 2004)- , su incapacidad para recibir a quienes usted sabe.
Su incapacidad demostrada para tener la firmeza –sí, ese supuesto valor tan encomiable- de sustitutir a sus subalternos cuando haga falta. Sólo ha sabido intercambiarlos para tapar agujeros, dando como excusa bananeros discrsos de símiles futbolísticos.
Ser el responsible directo de la peor y más manipulada información dada por una cadena pública.
Su constante manía de estar en dos o tres actos por día, para salir en C9… pero rehusar responder a preguntas de periodistas. ¿A qué teme? Le debe parecer a usted bien ese desprecio a su profesión. No puedo entenderlo. Al final va a ser que la independencia va a ser alabar al mandamás, independientemente de lo que haga.

En definitiva, no discrepo de que califique de suelto al presidente. Yo también andaría así si se me avecinara lo que se le avecina. ¿Resuelto? Bueno,la verdad es que ha resuelto bien poca cosa.