El Blog del Sapo

Hola amigos. Soy El Sapo y este es mi blog. Sería muy tonto daros indicaciones sobre de qué va. Ya iréis viendo. Sólo quiero daros mi opinión. Procuraré ser divertido y llamaros la atención sobre cosas que no veo reflejadas en los medios de comunicación. Bueno, mejor no os masacro con más presentación.

jueves, abril 09, 2015

EL CASO CANTÓ

Fíjense que me gusta, en líneas generales, lo que ha hecho Toni Cantó en esta ocasión y frente el trance ante el cual se encontraba. Y vaya por delante que lo digo antes de leer/oir demasiadas valoraciones de analistas políticos y obviando las ya vistas. Y vaya a continuación que en múltiples ocasiones TC no ha sido santo de mi devoción en su deambular político. No lo ha sido por no coincidir en más de un posicionamiento ideológico y por las maneras un tanto ruidosas que ha tenido para manifestarlos. Lo suyo con twitter ya es de antología y ha pagado buena parte de los sueldos de los guionistas de EL INTERMEDIO -loados sean- y humoristas varios. Sí le reconozco una capacidad -al margen de las pasadas de frenada- para hacerse ver, llevando de la mano a su partido y -algo menos- a su comunidad autónoma.
 
Pues bien, henos aquí ante una de esas situaciones en las que uno piensa que los pasos a dar por el implicado son de libro: esto, esto y esto. Aunque duela, aunque cueste dinero, aunque le coloque en una situación complicada... cosas que normalmente uno desearía ver, que son sin duda más fáciles de pedir que de hacer. Cosas que a lo mejor si estuviéramos en el lugar del implicado/a nos costarían mucho. Y no digo que lo que ha hecho sea exactamente lo que yo hubiera hecho en su lugar. Pero entra dentro de las opciones lógicas y razonables, pocas, que yo veo.
 
Veamos: un destacado activo de un partido pequeño (en representación) y en clara recesión está en desacuerdo con la líder del mismo. Tanto en las líneas generales como en dos asuntos muy concretos e importantes. La negativa de R10 a pactar con Ciudadanos -no es el primero en alzar la voz al respecto- y la falta absoluta de asunción de responsabilidades tras el batacazo en Andalucía.
¿Qué podía hacer? Vamos a ver: nos encontramos ante un garve desacuerdo con el partido. Y digo con el partido porque su líder marca la tendencia de opinión, refrendada el otro día en la reunión del órgano de dirección. Sin embargo, es suficiente el run-run en UPyD y está suficientemente personalizada en Díez la génesis de la discrepancia -el 50% de la cual se centra exclusivamente en ella- como para que Cantó no se sienta enfrentado al partido sino sólo a su máxima autoridad. Bien, cuando uno está en desacuerdo con todo el partido, lo razonable es irse. De ello se desencadenarían una serie de cosecuencias. Pero como el desacuerdo es con una persona que eventualmente preside el partido, caben dos opciones: irse del partido o presentarle batalla democráticamente dentro del mismo. Ello normalmente te llevará a presentar o apoyar una candidatura alternativa en un eventual congreso. Lo correcto es pues retirarse a un segundo plano y esperar al momento en que se sustancie esa otra forma de ver las cosas. Sin embargo lo habitual es, desgraciadamente, quedarse e ir lanzando dardos y torpedos. No digo que alguno no haya lanzado Cantó. Pero nada comparado a lo que estamos acostumbrados a ver.
 
Debemos hacer ahora un aparte para describir lo que algunas voces  deseaban y esperaban ver. Echen una ojeada al post "silly season" y verán a qué me refiero. Como Figo yéndose del Barça al Madrid o Alonso dejando Ferrari por McLaren, aparentemente Cantó no tenía otra cosa que hacer que dar el portazo y marcharse a Ciudadanos, con su nombre, su cuota de atención y aparentemente, incluso con su escaño: no recuerdo haber oido ni leído a nadie pedirle que lo dejara antes de cambiar de bando. Creo que dejé ya clara mi opinión sobre la escasa ética visible en esas incitaciones -interesadas sin duda- y en lo que me hubiera parecido si el diputado valenciano lo hubiera hecho.
 
Pues no. No lo ha hecho. Si sientes que tu presidenta no te representa y que tú por tanto a ella tampoco, lo lógico es dejar de ejercer las funciones que el partido te encomienda. Si sigues creyendo en tu partido y crees que las cosas se pueden hacer de otra forma, si crees que tu presidenta piensa, como el joven Indiana Jones que "se han perdido todos menos yo" lo suyo es que sigas en el partido. Y es honesto y coherente dejar el escaño y la candidatura autonómica para no verte en el papelón de usarlos como púlpito desde el cual hacerle la guerra a tu, de momento, jefa.
Por supuesto habrá puntos de vista que defiendan que le ha hecho una jugada a su partido. Claro que muchos, bien informados por insiders, opinarán que Cantó llevaba una semana o dos mareando la perdiz y a lo peor estaba intentando un pase a Ciudadanos... que finalmente no ha cuajado. Y claro que, añado yo de mi puño y letra, le ha hecho un roto más al casco del barco de UPyD. Aunque no veo qué otra cosa podía hacer, francamente.
 
Los hay que apuntan a una candidatura estatal en las generales con Ciudadanos. Yo creo que no: yo apostaría por que Cantó se enfrentará a Díez en el próximo congreso. Aunque mis únicas fuentes están en el baño y la cocina de mi casa, y me suelo equivocar en estos pronósticos...

miércoles, abril 08, 2015

Carolina...

 Carolina Punset: Muchas preguntas, muchas respuestas.

 

 Se pregunta Carolina Punset, cabeza de cartel de Ciudadanos por la CV, si es de izquierdas o de derechas en un elaborado y exitoso -muchas lecturas- artículo en EL MUNDO este lunes. La pregunta es retórica como casi todas las que incluye uno en un artículo de opinión. Pero como toda pregunta, se puede contestar. Sin embargo, me siento incapaz de hacerlo. Pero como ello forma parte de un hábil juego, esa es sólo una de las muchas preguntas -retóricas también- que se/nos hace Punset a lo largo del texto. Así que, aprovechando que las respuestas son fáciles, no he podido resistir la tentación de responderlas una por una. Cosa que es oportuna ya que tanta pregunta sin respuesta articula la argumentación del texto que pretende probar lo trasnochado y caduco -creo que hay algún calificativo algo más fuerte- de la división entre derechas e izquierdas. Argumento que como se podrá comprobar no comparto. Pero es que, contarriamente a lo pretendido, son precisamente las respuestas a las preguntas formuladas las que acaban dando el veredicto.
Paso sin más a contestar a tanta pregunta, no sin hacer tres puntializaciones: primero, disculparme por el atrevimiento; segundo disculparme si sueno prepotente o quedón -tengo una posición de ventaja como en los mates del tenis- ya que no es la intención, y decir he intentado responder sin que se aprecie en mí definición por derechas o izquierdas, al menos hasta el final. En letra normal, el texto de Punset. En negrita, mis respuestas.


¿Soy de izquierdas o de derechas?
* Carolina Punset 

Desde que empecé mi compromiso en la política activa en el año 2006 me enfrento regularmente a una pregunta a la que yo no doy importancia, pero que parece obsesionar a mucha gente. Y esta cuestión se traslada ahora a la formación que represento. ¿Ciudadanos es de derechas o de izquierdas?
Así me lo preguntó, con gran vehemencia, un periodista y tertuliano durante un debate. Le noté frustrado con mi respuesta, que es la de siempre, que no es de izquierdas ni de derechas, que somos Tercera Vía. Por su mirada supe que no me creía. Se notaba que sospechaba que lo que pretendía con esa respuesta era salirme del sempiterno esquema decimonónico de derecha-izquierda para pescar votos en cualquier pesebre...
Aún me cuesta comprender por qué algunos necesitan con tanta intensidad colgar etiquetas. Entre otras cosas, porque hoy por hoy, yo no sé qué es ser de izquierdas, y qué es ser de derechas. Me explico: ¿El PSOE es de izquierdas después de haber abrazado la economía de mercado, es decir, el modelo de economía capitalista?
-Sí, de una izquierda obviamente bastante moderada. ¿Menos de izquierdas que antes? Sí.
O personalicemos un poco más, ¿Es el Bono socialista ferviente católico y persona contraria al aborto más de izquierdas que el verso suelto del PP, el señor Monago, presidente de Extremadura?
-Probablemente sí. Sobre todo si nos centramos en el 80% de su discurso en lugar de lo más llamativo. Los "extras" que incluyen cada uno los colocan sin duda en la zona "mas hacia el centro" de sus respectivos partidos.

En USA los republicanos consideran el estado de bienestar, y en especial la sanidad gratuita, como una perversión socialista y roja, y, sin embargo, el PP y los partidos conservadores europeos lo reivindican como suyo. Por lo tanto, ¿el estado de bienestar es de izquierdas o de derechas?
-Es compatible con ambas tendencias políticas. En USA sin embargo es incompatible con cualquiera, por lo visto. Pero es un hecho bastante contrastado y asumido que la "izquierda" estdounidense adelanta por la derecha a muchas derechas europeas. No es una novedad.

Yo, que defiendo que las soluciones no son de izquierdas ni de derechas, sino buenas o malas, ¿qué soy?
-Eso sólo lo sabrá (tal vez, vea luego el final) usted. Pero lo de "las soluciones no son de izquierdas ni de derechas, sino buenas o malas" es un sofisma: que sean buenas o malas no implica que dejen de ser de derechas o izquierdas. Sólo las posturas muy radicales... de derechas e izquierdas sostienen que el bando contrario no tiene ninguna solución buena o aceptable. No obstante y volviendo a la pregunta, cuanto más se defina en cuanto a soluciones concretas -C's sigue sin concretar muchos temas vitales- más nos acercaremos a una respuesta.

¿Condenar la dictadura cubana de Castro y el modelo soviético o el de la China de Mao, es ser de derechas?
-No: valorar negativamente cualquier dictadura, independientemente de que esta sea (nominalmente, que esa es otra) de derechas o izquierdas, debería ser algo fuera de toda duda y por encima de colores políticos... democráticos. Asimismo, cualquier demócrata de derechas debería condenar sin ambages cualquier dictadura de derechas... sin que ello le convirtiera en un izquierdoso.

¿Creer en la justicia social y la enseñanza pública es ser de izquierdas?
-No necesariamente. Hay muchas derechas europeas que lo hacen. Incluida la de esta Comunidad aurónoma. Eso aseguran.

¿Es el Papa de derechas o de izquierdas?
-No lo sé. Defiende una serie de postulados que tradicionalmente han sido compartidos por las izquierdas. Aunque también se mantiene firme en otros, históricos del catolicismo, incompatibles con los principios básicos de las izquierdas. Se podría decir que para ser el jefe de los Católicos es bastante de izquierdas. Pero eso es como todo: Ratzinger venía con un aura de conservadurismo y sin embargo hizo parecer conservador -aún más- a Wojtila.

¿Implicarse en la defensa del medio ambiente y la ecología, como lo hizo el millonario y vicepresidente Al Gore a través de su oscarizado documental 'Una verdad incómoda', es de izquierdas o de derechas?
-De nuevo ni lo uno ni lo otro. Que haya una serie de ideas básicas sobre cómo se ha de manejar socialmente el ser humano que debieran ser comunes a todas las tendencias políticas democráticas no quiere decir que estas sean iguales. Sigue habiendo terrenos para la discrepancia. Pero también los hay irrenunciablemente comunes como trabajar, cobrar, contribuir, participar en la vida politica con el voto, etc. La protección del planeta debería ser una de ellas. Que no lo sea, es culpa de todos. Por otra parte, Gore en su país se supone es de izquierdas. No hay contradicción.

¿Rechazar la energía nuclear como ha hecho Ángela Merkel en Alemania es de derechas o de izquierdas?
-Es más habitual en las izquierdas, pero no debería ser así. Es en todo caso síntoma de sentido común en Merkel. Y ello no le hace dejar de ser de derechas.

Y yo, que defiendo que las soluciones a los problemas de los ciudadanos no son de izquierdas ni de derechas, sino solo buenas o malas, entonces ¿qué soy yo? ¿De derechas o de izquierdas? Menuda esquizofrenia....
-Hummm... me temo que repetimos una pregunta de hace seis. La respuesta sigue siendo la misma. Aprovecho para añadir que los políticos que creen que existen soluciones de izquierdas y de derechas también creen que las hay buenas y malas. Y yo.

¿Realmente alguien se cree que los trilladísimos clichés del siglo XIX son la única manera de definirse en pleno siglo XXI?
-No. Pero creo que a cualquier observador político no se le escapa que definirse como de derechas o izquierdas es sólo (parte de) la portada. Luego queda escribir todo el libro.

¿Reducir la política a las trincheras ideológicas de rojos y azules no es condenarla a ser una bandera más?
-La política es una bandera más, mal que nos pese. Pasar de dos banderas o trincheras a tres -Tercera Vía- no cambia demasado el panorama, creo. Aparte, de nuevo las banderas en sí no son malas, sino el uso que se hace de ellas.

Quién afirma '¡yo soy de derechas!' o '¡yo soy de izquierdas!' con la misma vehemencia que quién exclama '¡yo soy del Madrid!' o '¡yo soy del Barça!', ¿no responde más bien a un sentimiento atávico y primitivo de pertenecer a alguna tribu? Habría que estudiarlo...
-No podía faltar un símil furbolístico. Yo también los uso, pero seamos conscientes de que llevan mucha trampa. Sin embargo, y acogiéndonos a ello, hay hinchas de un mismo equipo de infinitas variedades. Desde los que profesan un odio irracional y estúpido -como todos los odios- a "el otro" equipo hasta los que sienten absoluta indiferencia o incluso respeto, todo ello combinado con amplias escalas de civismo -o su carencia- a la hora de manifestar sus filias y fobias. No obstante, no hay mucho que estudiar porque creo que está muy claro: de hecho, la respuesta a la pregnta es "Sí": el problema está en la vehemencia, habitualmente inadecuada para la mayoría de los postulados democráticos. Lo malo es la vehemencia, y el creerse más que los demás por lo que se afirma, que lo que se afirma en sí. Ya sea ser de izquierdas, de derechas, del Inter, o presumir de decir "cocretas".

Creo que sería bueno ir prescindiendo de los rancios sectarismos.
-Vale, no es una pregunta, pero no me puedo callar. Distinguir entre derechas o izquierdas no implica "rancios sectarismos". Lo siento, ninguna de las preguntas postuladas arriba lo ha demostrado.

Por eso me acerqué a Ciudadanos, que, por cierto, en eso de estar por delante de las etiquetas, ha sido un movimiento ciudadano adelantado a su tiempo. Lo hizo antes que Podemos e incluso antes que UPyD, con permiso de la formación Foro, que lideró mi padre en 1991, otros que probablemente fueron demasiado adelantados a su tiempo.

* Carolina Punset es candidata a la Generalitat Valenciana por Ciudadanos.
-Bien, para concluir, podríamos fácilmente llevar a C's a un terreno donde tendría que definirse necesariamente. Y entre dos opciones que habitualmente llevan a acalorados debates donde no se hace prisioneros; y donde la vehemencia, los sectarismos, los apriorismos y las trincheras están a la orden del día. Y es que creo que Ciudadanos apareció caracterizándose por una postura muy definida ante algo que, creo recordar, se llama Nacionalismo. ¿Digo yo que C's ocupe una postura extremada o vehemente al respecto? ¡Líbreme Dios! aunque, definida, sin duda, sí. Y que se pueda tomar una postura definida ante tal tema sin que ella revista toda esa serie de característicaas negativas que según vd. parecen acompañar a las tomas de postura, no hace sino refutar el argumento sobre derechas/izquierdas. ¿Por qué iba a darse esa posibilidad -definirse sin ser extremado y sectario- ante el nacionalismo y no en color político?

Quisiera concluir con una especie de aforismo que siento como muy mío. Y es que de hecho, comparto ese rechazo a la autodefinición derecha/izquierda como algo lleno de prepotencia, orgullo, vehemencia, superioridad y sectarismo. Que ¡ojo! no digo que no se dé: se da y mucho, pero ni lo hace todo el mundo ni es inevitable. Y es por ello que defiendo la posibilidad de ser de derechas o izquierdas sin caer en ello. Y sí creo que al tomar una decisión, es bastante tonto decir "¿Qué debo pensar de esto? a ver.... pues como soy de "------as", pues pienso esto!". Yo, por mi parte -y por favor, sin que por ello parezca que creo haber inventado la sopa de ajo- suelo intentar tener una opinión de lo que mis entendederas me permiten, y haciendo balance de ello, suelo decir : "Pues si pienso todo esto, debe ser que soy de izquierdas".
Un afectuoso saludo desde la charca.